A principios de los 2000, Tito el Bambino, quien para entonces ya había alcanzado el éxito como parte del dúo Héctor & Tito, tuvo un gesto clave que marcó el camino de Yandel hacia el estrellato.
Se dice que Yandel, junto a Wisin, aún estaba buscando consolidarse en la industria cuando Tito decidió darles una oportunidad al incluirlos como parte de una gira y en varias colaboraciones musicales. Tito vio el potencial de Wisin y Yandel cuando aún no eran reconocidos como “Los Líderes” y les abrió las puertas en eventos importantes.
Una de las anécdotas más comentadas ocurrió en un concierto en Puerto Rico. Tito el Bambino estaba programado para cerrar el show, pero en un acto de humildad y compañerismo, decidió ceder su espacio de cierre a Wisin y Yandel para que tuvieran la oportunidad de brillar frente a una multitud masiva. Este gesto no solo fortaleció su amistad, sino que también marcó un momento importante en la carrera de Wisin y Yandel, consolidándolos como futuras estrellas del género.
Con el tiempo, esta relación de respeto y colaboración se mantuvo firme. De hecho, Tito y Yandel volvieron a unir fuerzas en temas como “Déjala Volar” (2006) y “Imagínate” (2010), donde también participó Don Omar. Esta conexión y el apoyo mutuo entre ambos artistas reflejan la hermandad y los lazos que existían entre las figuras pioneras del reggaetón, marcando una época dorada para el género.