Recuerdo la declaración de Jorge Valdano justo después del partido entre Barcelona y Valencia, tras un hat-trick impresionante. En la rueda de prensa, Jorge Valdano, que en ese momento era el entrenador del Valencia, dijo:
"Eso no es un hombre, es una manada de caballos."
Después de su gol legendario, en el que recorrió 47 metros en 11 segundos, regateando a cinco defensores, el director español enfocó la cámara en su entrenador, Bobby Robson, que se agarraba la cabeza con las manos gritando desde el banquillo:
"¿Pero cómo es eso posible?"
Al final del partido, Bobby Robson pronunció sus palabras más famosas:
"Puedes ir a cualquier parte del mundo, y estoy seguro de que no encontrarás a un jugador como él."
Ese gol fue convertido más tarde en un anuncio de Nike con una voz en off que decía:
"Es real, no es un sueño..."
Imagínate, en el pico de su brillantez en la liga italiana y en el fútbol mundial en general, te llamaban "El Fenómeno".
Un día, el médico le dijo:
"Te ayudaré a caminar, pero no volverás a jugar al fútbol."
Volvió y ganó la Copa del Mundo con una sola pierna.
Hablan de historia, pero él la escribió con media rodilla.
Si quieres otro Ronaldo, tendrías que combinar a los mejores delanteros de esta era, y quizás así obtengas al Ronaldo después de la lesión...
Pero ¿el Fenómeno antes de la lesión? Olvídalo. Incluso si juntas a todos los jugadores del mundo.